Siempre se dijo, con ánimo de ofendernos sin duda alguna, que África empezaba en los Pirineos. Pero la era Obama en el aún inédito siglo XXI lo han hecho posible: ¡Es la hora de África! Nace desnuda, desvalida, pequeñita y tierna pero sus inmensas ganas de vivir y el potente y caliente corazón que impulsa a todos los recien llegados es, por encima de todo, el más bello y fecundo canto a la esperanza. África es ahora más nuestra o nosotros más "africanos". Y como al cariño y al amor se llega por el conocimiento... ¡Enviadad unas fotitos, coño!
